ENTREVISTA Choike en Across Andes
- Quique Alarcón
- febrero 4, 2020
- 10:07 pm
El pasado 30 de noviembre se realizó la primera versión de Across Andes, la primera carrera de bikepacking de Chile en formato de total autosuficiencia. La ruta contempló 1450 kilómetros de ruta, distribuidos en 5 puntos de control, a realizar en un plazo máximo de 9 días. Choike Bags fue parte del evento como sponsor oficial y varios de los corredores incluyeron nuestros bolsos en su setup para lograr el desafío.
Hablamos con 4 participantes de la carrera, que nos contaron anécdotas de sus aventuras y de qué uso le dieron a los bolsos Choike. Después de todo cada ciclista le da un uso específico a nuestros bolsos, y estas son sus respuestas.
[divider height=»30″ style=»default» line=»default» themecolor=»1″][heading tag=»h2″ align=»center» color=»#000″ style=»lines» color2=»#000″]FRANCO CRAVERO @bicineta[/heading]¿Por qué te inclinaste por un setup de bikepacking para afrontar la Across Andes?
Franco Cravero: Porque tenía la experiencia previa de viajar en modo cicloturismo durante varios meses con la combinación framebag + seatbag + alforjas delanteras y eso te da muchas nociones de qué necesitas y qué no para tu día a día. Las alforjas son super útiles, sobre todo para viajes largos, pero para 9 días bastaba con framebag y seatbag. Te olvidas de parrillas y accesorios extras, solo los bolsos. Más simple y menos peso también.
¿Qué bolsos Choike elegiste en tu setup de la Across Andes y por qué?
FC: Tengo el triple pack, pero el de manillar lo he usado muy pocas veces, no me ha hecho falta. El framebag es parte de mi rutina diaria, lo uso 24/7 para moverme a todos lado. Te olvidas de andar con mochila y eso es un gran alivio sobre todo con temperaturas altas. El seatbag siempre lo uso cuando el framebag me queda corto.
¿Qué llevabas en cada uno de esos bolsos, que finalmente te ayudaron a finalizar la carrera dentro del tiempo?
FC: Cuando uso seatbag mi orden parte por lo que voy a usar con menos frecuencia y/o solamente al momento de dejar de pedalear para dormir. Todo eso va al fondo del seatbag, para mantener ese trozo de volumen bien denso y apretado. Bienvenida la ropa que no vas a necesitar usar de día o cosas que no vas a sacar mientras pedaleas. Es un punto clave en la estabilidad del bolso para que no coletee ni se vaya hacia abajo. Ahí llevé pilas de repuesto, una cámara, ropa de recambio, saco de dormir y cercano a donde se abre el bolso las cosas de mediana frecuencia. Que sea simple y rápido de abrir el bolso, sacar lo que buscabas y cerrar. Arriba del seatbag llevé una colchoneta tipo caja de huevo, que funciona perfecto con los elásticos que lleva arriba el bolso. Muy útil también para desabrigarse en plena ruta y dejarla bien firme ahí en un par de segundos sin tener que abrir y cerrar bolsos. En el framebag puse todo lo de mediana y alta frecuencia de uso: kit de parchado, cámara, comida rápida de sacar (maní, frutos secos, barritas pan, galletas), abrigo, bloqueador, powerbank, etc. Bolso a la dirección y tubo horizontal para billetera, celular, dulces, plata, hoja de ruta. También adapté un banano viejo para ir como bolso de manillar donde llevaba también cosas de rápido acceso: repuestos de la bici, mini botiquín, barritas, llaves y cosas chicas.
¿Recomendarías el bikepacking a otros viajeros en bici? Cicloturistas, urbanos, randonneur?
FC: Siempre lo hago. El framebag ocupa un espacio muerto en la bici que suele usarse solo para la botella de agua. Yo la llevo en la horquilla y así todo el triángulo se convierte en un espacio para transportar cosas. Lo uso para ropa y almuerzo hacia la pega, para las frutas y verduras en la feria. En rutas largas me ha resultado muy bien llevar un camelbag ahí, porque conserva muy bien la temperatura fría del agua en un día de calor.
La tranquilidad de Franco en Portillo, consciente de que lo más difícil ya estaba logrado.
Franco enfrentando una de las tantas cuestas de la ruta de Across Andes
La concentración de Franco en dar la próxima pedalada
¿Alguna anécdota de la Across Andes que quisieras compartir?
FC: El framebag lo tengo desde mitad de 2017 y me ha acompañado durante más de 30.000 km más o menos. Tiene mucha historia, incluyendo distintos climas, tierras, bichos, etc. Muchos paisajes, mucho sudor y mucha tierra. Durante la Across Andes, cuando subimos a Portillo el penúltimo día, preferí meter al seatbag todo lo que no iba a necesitar para ir y volver y lo escondí en las afueras de Los Andes, en un árbol al costado de la ruta. Después de timbrar en la montaña bajé de noche a Los Andes y ahí lo encontré, tal y como lo había dejado. El bolso tiene buenos reflectantes y con un poco de luz ya se asomaba la pata del Choike.
¿Por qué te inclinaste por un setup de bikepacking para afrontar la Across Andes?
Cristian Muñoz: Poseo un bicicleta de carbono que no da las opciones de las típicas bicicletas de aluminio o cromo, que tienen pernerías especiales para instalarle portabotellas y otros accesorios.
¿Qué bolsos Choike elegiste en tu setup de la Across Andes y por qué?
CM: Escogí el StemBag cilíndrico, sabía que la Across Andes iba a ser difícil por las altas temperaturas, así que necesitaba tener el máximo de capacidad de agua disponible, y que mantuviera el líquido lo más frío posible. También había que pedalear de noche, entonces se hacía necesaria un porta botella adicional, de fácil instalación.
¿Recomendarías el bikepacking a otros viajeros en bici?
CM: Absolutamente sí, Choike Bags es una marca de muy buena calidad y con precios razonables.
En algún lugar de la ruta, disfrutando de las pocas sombras que regaló el camino.
Luego de haber considerado el retiro en el primer día de carrera, esta es la cara de determinación de Cristian al enfrentar uno de los tramos gravel de la ruta de Across Andes
Cristian en la meta, luego de haberlo dado todo.
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¿Alguna anécdota de la Across Andes que quisieras compartir?
CM: Una anécdota que viví junto a Juanma Venturino. El primer día de carrera, al iniciar la última cuesta, ya no daba más con el calor, así que me tiré a un lado del camino, en una de las pocas sombras que encontré en el camino. Sentía que la carrera estaba demasiado difícil y que quizás no estaba lo suficientemente preparado. A la distancia vi a Juanma acercarse, y me dio un poco de vergüenza el hecho de estar semi muriendo a la orilla del camino el primer día de carrera, cuando a el lo veía bastante bien de físicamente. Pero una vez que pasó a mi lado, tira su bici y me pide un espacio de sombra. Ambos estábamos en las mismas condiciones jajajajaj. Eso me ayudó a saber que no era solo yo el que venía mal con el sol y me dio esperanzas para continuar con la carrera.
Otra anécdota, es que en Vicuña compré una Pepsi de medio litro para tomarla a la noche, en los momentos de falta de azúcar. El StemBag lo tenía ocupado con una caramagiola de 1 litro, por ende la puse en un bolsillo de atrás de la tricota. Sin pensar que el terreno por donde pasamos era bastante accidentado, al llegar a la cima de la cuesta interminable antes de Andacollo me dispuse a tomar la tan ansiada bebida y… ¡ya no estaba! Ni cuenta me di cuando se me cayó. Volver a buscarla no era una opción, por la dificultad del camino y por lo oscuro de la noche. A la semana de terminada la carrera, el brasileño Willians Nascimiento escribe en el grupo de Across Andes «Muchas gracias a aquella persona que me dejó su Pepsi de 500 cc en medio del cerro, y que estaba bastante fría». Me imaginé su sorpresa de encontrar una bebida en medio de la nada. Me queda la satisfacción de que le sirvió a un colega de ruta, quizás la necesitaba más que yo.
Felicitaciones por ganar la categoría «solo» de la primera carrera de bikepacking en formato de autosuficiencia de Chile! ¿Por qué te inclinaste por un setup de bikepacking para afrontar la Across Andes?
Rodrigo Rojo: Tenía un seatbag innecesariamente grande para lo que llevaría (16 litros) por lo que empece a cotizar uno más compacto y de menor capacidad, con todas las ventajas que eso llevaría. El que yo tenía me rozaba un poco los muslos y se balanceaba cuando me paraba en los pedales. El Seatbag Gravel de 10L en cambio queda mucho mejor integrado a la bicicleta. Para lo que necesitaba era perfecto. Vi el de 6 litros también, pero pensé que en algún momento necesitaría espacio extra, por ejemplo para meter una bebida de litro y medio.
¿Qué llevabas en cada uno de esos bolsos, que finalmente te ayudaron a finalizar la carrera dentro del tiempo?
RR: Además del seatbag Choike, llevé un toptube bag, de esos que te permiten ver la pantalla del teléfono, que ocupé como navegador. En el toptube bag llevé además 2 powerbank, cargador y cables. Para cosas chicas de primera mano ocupé un banano (multi allen, desmontadores, una cámara de repuesto, parches, pegamento, ración de marcha, dinero, documentos). Por lo tanto, en el seatbag llevé todo el resto: ropa, manta térmica y tres cámaras de repuesto.
¿Recomendarías el bikepacking a otros viajeros en bici?
RR: Absolutamente. El primer seatbag que compré es muy incómodo, muy ancho y roza los muslos. En viajes anteriores debía llevar una cinta de embalaje para unirlo más al sillín, para que no se moviera tanto y amarrarlo con un cordel extra. Para mi es mucho mejor el Seatbag Choike de 10 litros, que me permite guardar lo justo y necesario, y de esa manera reparto los otros elementos en otras partes de la bicicleta, o en una mochila.
Toda la determinación y concentración de Rodrigo Rojo.
Una de las pocas detenciones de Rodrigo fueron las obligatorias: los puntos de control.
Merecido refresco para Rodrigo, luego de varios días bajo un sol implacable y temperaturas sobre los 40ºC
¿Alguna anécdota de la Across Andes que quisieras compartir?
RR: Solo el último día de la carrera descubrí la utilidad de las amarras que están por encima del seatbag. Compré una bebida de litro y medio en la Cuesta de Chacabuco, pero tomé sólo medio litro porque estaba apurado, y como hacía mucho calor no quise echar el resto en las caramagiolas, en las que llevaba agua para mojarme. Ahí recién me di cuenta que podía llevar esa botella con el resto de la bebida en las amarras, quedando muy bien sujeta, sin necesidad de abrir la bolsa. Gracias a eso después paré en la cumbre y me mandé un merecido y refrescante «pencazo» de bebida, que harta falta me hacía.
¿Por qué te inclinaste por un setup de bikepacking para afrontar la Across Andes?
Sebastián Lucero: En la Across Andes usé el Stembag cilíndrico. Lo compré originalmente para un viaje a Canadá y Estados Unidos, para llevar una botella de agua extra pero al final lo ocupé principalmente para llevar el gas pimienta anti osos.
¿Qué llevabas en tu equipo bikepacking?
SL: El Stembag cilíndrico lo utilicé para llevar barras, geles, algún tipo de comida para el día mientras anduviera rodando y mi batería externa de medio kilo, que me permitió acceso rápido para cargar mi GPS y teléfono. El bolso anduvo muy bien y pude tener lo que necesitaba a la mano.
¿Recomendarías el bikepacking a otros viajeros en bici?
SL: Sí, totalmente. En especial el Stembag cilíndrico aguanta bastante peso, está muy bien fabricado e incluso resistió un ataque de un topo hambriento.
Sebastián Lucero devorando kilómetros.
Dándolo todo en plena ruta gravel
Sebastián Lucero compartiendo ruta junto a Juan Manuel Venturino
¿Alguna anécdota de la Across Andes que quisieras compartir?
SL: Me equivoqué de ruta cuando venía de vuelta a Combarbalá. Entre un enredo con el GPS y por no haber estudiado un poquito más la ruta, forzosamente le agregue como 60 kms a mi carrera. Fue difícil ya que ese día ya había sido el más largo de todos.
Como equipo Choike Bags estamos orgullosos de haber sido parte de la histórica primera carrera de ultraciclismo de Chile, en formato bikepacking y de autosuficiencia. ¡Hasta la próxima aventura!
Fotografías: Across Andes, Aventura de a dos, Mariano Lopez y Paulina Pinto
Entrevista: Enrique Alarcón @bicipensante
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The info is really unique.
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